Nuestros políticos no son muy cultos. La cultura es la felicidad barata. Asistir a una buena obra de teatro, ver una buena película, leer un buen libro es una extraordinaria felicidad 25:20
La música. Solo cuando aparece la música en escena el teatro puede ascender a la cualidad de arte
Publica el libro:
«Joven no me cabree»
Para un actor es más importante Beethoven que Shakespeare